Parece que siempre estuvieron allí y, sin embargo, los navegadores de Internet existen desde hace poco más de tres décadas, coincidiendo, como es lógico, con la irrupción de la revolución de Internet en nuestras vidas. Con todo, estos apenas 30 años han dado para mucho. Una carrera apasionante espoleada por el afán de superación tecnológica pero, sobre todo, por una desbocada competencia en busca del navegador capaz de imponerse sobre todos los demás. Hoy, sin embargo, la diversificación parece la clave. Te lo contamos en este artículo.
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Word Wide Web: El primer navegador de Internet
El primer navegador web fue bautizado en 1990 como WorldWideWeb. Su creador fue el científico de la computación británico Tim Berners-Lee, padre de la World Wide Web y del lenguaje HTML. Sin embargo, el primer navegador que viviría una relativa expansión fue Mosaic, gracias a que se desarrollaron versiones para Windows y Mac (entonces Macintosh). Mosaic, obviamente, tenías sus limitaciones. Por ejemplo, aunque renderizaba imágenes y funcionaba con JPG y GIF, no lo hacía con PNG. Estas y más cuestiones serían superadas por el siguiente navegador que marca un nuevo hito importante: Netscape.
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Una nueva generación de navegadores: Netscape
La irrupción en el mercado de Netscape muy pronto borró del mapa a Mosaic. Como sabes, un navegador es un programa que posibilita el acceso a Internet decodificando la información contenida en páginas y archivos para que podamos tener acceso a ella. En este sentido, Netscape era una aplicación de gran eficiencia. Era mucho más rápido que Mosaic y, esencial para expandirse, era compatible con Windows.
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Internet Explorer de Windows
Gracias a la integración del navegador Internet Explorer en su sistema operativo, Microsoft logró desbancar a Nescape y quedarse por un tiempo nada menos que con el 95% del pastel en el total de usuarios. El imperio del Explorer fue largo, pero pronto hubo nuevos jugadores en la partida: Mozilla Firefox (Netscape renacido), el Safari de Apple lanzado en 2003 o el Chrome de Google, aparecido en 2008. Con el auge del buscador de esta firma tecnológica, se volvió cada vez más importante para las empresas el posicionamiento en Google para no ser invisibles ante los clientes. Microsoft ha anunciado recientemente que en junio de 2022 Microsoft Internet Explorer desaparecerá, lo que marca el final de una época en lo que a navegación de Internet se refiere. Le sucede el Microsoft Edge.
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La lucha por el posicionamiento SEO
Como decíamos al principio, hoy en día la diversificación es la norma. Actualmente, los considerados principales navegadores son Mozilla Firefox, Microsoft Edge, Google Crom, Opera, Vivaldi y Safari de Mac. Todos ellos son el campo de batalla en el que las empresas luchan por el posicionamiento en buscadores. Toda Agencia SEO, así como toda empresa de marketing digital quiere ver a sus clientes en las primeras posiciones de Google o cualquier otro buscador en todos estos navegadores. Y el viaje no ha hecho más que comenzar. Sin duda nos queda mucho por ver e innovar.
